En esta nueva emisión, Alejandro inicia la semana combinando ironía, preocupación y un tono de alerta sobre dos ejes principales que se entrecruzan en la política venezolana: la inesperada salida de María Corina Machado hacia Europa y la crítica situación de Citgo, uno de los activos más valiosos del país. Desde el primer momento, el conductor subraya que, aunque la atención mediática se ha desbordado alrededor del viaje de Machado —quien aseguraba repetidamente que no abandonaría Venezuela—, el tema verdaderamente crucial para el futuro de la nación es el que muchos prefieren ignorar: la posible pérdida de Citgo.
Alejandro señala que mientras la maquinaria comunicacional celebra la llegada de la líder opositora a Oslo para recibir su premio, lo que él llama “la gran fiesta de la faraona”, en paralelo avanza un proceso judicial y político que podría significar la desaparición de uno de los últimos activos estratégicos del país. Recuerda que Citgo, valorada en más de 14 mil millones de dólares, no solo representa una empresa petrolera en territorio estadounidense, sino un patrimonio intergeneracional, cuyo destino está siendo decidido sin transparencia y, según él y sus invitados, bajo un entramado de intereses del interinato, de dirigentes opositores y de factores internacionales.
Mientras desarrolla esta dualidad —celebración política vs. crisis patrimonial— el presentador insiste en que el viaje de Machado no es anecdótico: para muchos simboliza una ruptura entre su discurso previo y sus acciones actuales, algo que él contrasta con la urgencia real del caso Citgo. A pesar de la euforia de sus seguidores, Alejandro recalca que el país enfrenta problemas más graves que un baño de pueblo internacional, y que la oposición, lejos de asumir responsabilidades, ha permitido que la atención se desvíe del inminente remate de la empresa.
La introducción del programa establece así un contraste contundente: mientras el país se distrae con la ceremonia en Oslo, Citgo podría estar siendo entregada sin resistencia visible, y por ello Alejandro anuncia que contará con invitados que profundizarán en el tema, expondrán responsabilidades y explicarán qué se juega realmente detrás de este activo. Con este marco, invita a los espectadores a mirar más allá del ruido político y enfocarse en lo que considera el verdadero corazón de la discusión: el futuro económico de los venezolanos y la defensa del patrimonio nacional.
